El resto de los días los pasamos con la familia en Lugo, sin parar, pero disfrutando.
El huerto en casa, una maravilla:
La granja en casa, las «vaquiñas» merendando o de siesta, que también tienen derecho:
Otras jugando al escondite:
Ermita de la Virgen del Carmen (Villabad – Castroverde – Lugo). En este sitio tan maravilloso fue donde nos casamos hace ya….





Paseando por la sierra lucense:
Recordando el cole donde estudió mi papi, construido en 1931 y ahora en ruinas, pero ahí se mantiene. Una pena que esté abandonado:
Y me faltaba la colección de hortensias, que crecen por todas partes en Galicia. Mis preferidas las moradas:
y la de hórreos:
Y hasta aquí hemos llegado en este viaje. Esperamos que os haya gustado y que os animéis a visitar la Ribera Sacra que merece la pena.