Madrugamos y a caminar toca. Hora y cuarto en el North Hudson Park. Hoy se avecina calor, que ya a las 7 am se nota. Hablan de ola de calor, llegaremos a los 40ºC, que junto con la humedad reinante es bastante.
Después de desayuno y ducha, nos vamos a la agencia donde suele ir mi tío, en Secaucus, a preguntar sobre viaje a Washington, por si tienen packs que incluyan viaje, hotel y visita. Nos recomiendan mejor coger el autobús, y nos dan´varios planos e información de la ciudad, así que toca buscarlo en internet.
Una vez de vuelta a casa, reservamos viaje. Ya había leído sobre la compañía Megabus para viajar a Washington en varias webs, así que sin más saco los billetes de ida y vuelta. De lo de billetes a 1$ como que no toca, imagino que es reservando con mucha antelación. Nos cuestan los dos billetes de ida y vuelta 92$.
Reservo también el hotel, en el Holiday Inn Capitol, en el que ya había estado mi tío y está bien situado, justo detrás del Museo del Aire y del Espacio. Así que viaje a Washington arreglado.
Comemos en casa y por la tarde nos vamos de paseo en coche hasta el Washington Bridge a admirar vistas de Manhattan desde allí, que son impresionantes. Llegamos al Fort Lee Historic Park, y nada más aparcar vemos a un ciervo, así que fotito no muy buena porque el pobre salió corriendo 🙂
Las vistas del puente desde el parque son impresionantes, al igual que las vistas del Hudson y el alto Manhattan.
Como se ve en la foto, el puente tiene dos niveles para coches y también una parte separada para peatones.
Más al norte del puente de Washington hay una zona de picnic llamada Ross Dock Picnic Area desde donde las vistas del puente también son preciosas. Hay bastante gente haciendo barbacoas.
Luego según anochece cogemos rumbo hacia el sur hasta el Hamilton Park, mi sitio preferido para admirar Manhattan de día o de noche.
En el Hamilton Park tuvo lugar un famoso duelo el 11 de julio de 1804. Ese día se dieron cita en este lugar, llamado Hamilton-Burr Dueling Grounds, dos políticos estadounidenses: Aaron Burr, vicepresidente republicano de los Estados Unidos de América del Norte en aquella época, y Alexander Hamilton, líder ideológico del partido federalista.
Cuando el entonces presidente Jefferson dejó de lado a Burr para la elección presidencial de 1804, el vicepresidente decidió presentarse como candidato a Gobernador de Nueva York. Burr perdió las elecciones y culpó de la derrota a una campaña en su contra orquestada desde su propio partido. Hamilton también se opuso a Burr públicamente y éste le exigió una explicación a Hamilton y una rectificación pública de todos los agravios contra él. Hamilton se negó y entonces Burr le retó a duelo.
Así que en la mañana del 11 de julio de 1804, ambos se dieron cita en esta zona de Weehawken. Las armas elegidas fueron pistolas de duelo equipadas con una sola bala. La bala de Burr hirió a Hamilton; la de Hamilton falló. Al día siguiente Hamilton fallecía a consecuencia de la herida. Burr murió años más tarde, en 1836, pero su carrera política quedó truncada para siempre a raíz del duelo.
En el parque hay un monumento con el busto de Hamilton, donde se supone que tuvo lugar el duelo.
De viaje con mamá 